UGT BMN-Andalucía: junio 2012

martes, 19 de junio de 2012

Intervención en Asamblea General 18-6-12

Ayer día 18, en la Asamblea General de Caja GRANADA, los consejeros laborales de UGT y CC.OO. hicimos una intervención conjunta en la que anunciamos el voto contrario al Informe de Gestión. Además y en el punto referido a remuneraciones, propusimos la eliminación de la vicepresidencia ejecutiva y la secretaría del consejo remuneradas, así como la adecuación del tamaño, estructura y gastos de los Organos de Gobierno de Caja Granada a su nueva realidad. Todo esto en consonancia con los tiempos de recortes que afectan a la plantilla. Aunque "a futuro" se aceptó la necesidad de proceder a esta adecuación, se votó la propuesta de resolución tal cual fue aprobada en Consejo, sin ninguna mención a políticas de ahorro en Organos de Gobierno. Por este motivo no contó con nuestro apoyo.

Respecto a nuestra intervención, nuevamente nos hemos encontrado con la reacción  desproporcionada del Presidente de Caja Granada. Él Presidente agradeció el tono de nuestra intervención pero nosotros no podemos decir lo mismo del tono de la suya. Resulta triste que en estos momentos tan difíciles el Presidente  reaccione a la crítica con una acritud y agresividad verbal no recordada en ninguno de sus predecesores, alguno de los cuales tuvo que soportar críticas más severas. Su desproporcionada respuesta nos dejó perlas dialécticas que hoy hubieramos podido aprovechar con efectos asegurados. Pero por respeto a la Institución no lo haremos. Como ya hicimos en similares ocasiones nos limitaremos a reproducir nuestra intervención:



Sr. Presidente, señores y señoras miembros de la Asamblea General de CajaGRANADA:

Intervención punto 3º (Informe del Presidente)

Los consejeros y consejeras de CCOO y UGT que fuimos designados para representar a nuestros compañeros y compañeras, trabajadores y trabajadoras de CajaGRANADA, hoy también de BMN, queremos manifestar:

Durante 2010 y 2011 acompañamos el proceso de integración en un SIP y posteriormente con la segregación de activos y pasivos a la sociedad BMN, atendiendo siempre a las promesas de nuestros máximos responsables en la Entidad de las que se desprendían su compromiso institucional y personal de reforzamiento financiero del territorio que nos asignaba la sociedad central, Andalucía, como la garantía también de pleno empleo para la plantilla procedente de CajaGRANADA. Así estaba dicho y escrito. Y así lo recogimos en el Protocolo, Acuerdo Laboral de 2010 y preacuerdo de  2011, como quedó patente en las diferentes asambleas de estos dos años.

Mientras tanto y somos conscientes, los sucesivos gobiernos iban aprobando normas regulatorias en el sector que agravaban más la situación financiera y que impedían la principal función de nuestras instituciones: Posibilitar el crédito para las personas y empresas, como la ayuda social a través de sus OBS y fundaciones. Obra social más que centenaria en este país.

Desde enero de 2011, El Consejo de Administración de BMN al que pertenecen por representación de esta Asamblea el Presidente y Vicepresidente, ambos con carácter ejecutivo, han tomado decisiones económicas, estratégicas y de gestión de recursos humanos que han redundado negativamente en el territorio andaluz, y lo aclaramos:

Hasta el año 2010, CajaGRANADA decidió reestructurar la red de oficinas cerrando oficinas deficitarias y sin posibilidades reales de mejora. Para ello acordamos un conjunto de medidas que protegieran el empleo y la atención a nuestra clientela, manteniendo la calidad reconocida de nuestro servicio financiero.

Sin embargo, en 2011 la decisión de centralización en Madrid de los SSCC y de la equiparación de los sistemas informáticos de las cuatro Cajas con criterios que nos confunden y que suponen una modificación sustancial de condiciones de trabajo, han producido un “éxodo” con la desaparición  de cientos de puestos de trabajo en nuestro territorio, lo que ha significado la destrucción de la vida familiar y personal de muchos de nuestros compañeros y compañeras.

La decisión de  proseguir con un nuevo número de cierres de oficinas al previsto inicialmente en la integración y que representan una pérdida en términos de recursos y de exclusión social, agrava la situación descrita.

Hoy, como consecuencia de las decisiones tomadas en Madrid, BMN se suma a la exclusión financiera, pérdida de las mejores prácticas operativas y una destrucción de empleo indirecto entre las empresas participadas y proveedores locales.

Finalmente, una huelga convocada para frenar la anunciada política de despidos en BMN fue defendida “cerrando filas” por la plantilla y los sindicatos y sin el respaldo decidido de nuestro Presidente al que acudimos sin que fuéramos recibidos, ni se nos diera respuesta alguna. En este sentido recuerdo sus palabras de la anterior Asamblea del 22.12.2011 donde nos marcaba la nueva hoja de ruta de CajaGranada: 1º Seguir la lucha contra la exclusión financiera, 2º Seguir protegiendo los derechos y deberes de nuestra plantilla, 3º El grupo donde se den esas condiciones ahí debe de estar CajaGranada, y apostilló: “LO PUEDO DECIR MAS ALTO, PERO NO MAS CLARO”

Estamos ante una situación límite, resultado de una gestión de la que la plantilla de BMN no es responsable.
Estas decisiones tomadas para el territorio de Andalucía, se han caracterizado por una falta de planificación y organización adecuadas. La última muestra de ello la tenemos en el proceso de integración tecnológica.
Faltan tan solo dos días para que se cumpla un mes desde que la red, que CajaGRANADA entregó en Andalucía, adoptó el nuevo terminal financiero de BMN, y los problemas no solo continúan, sino que no hay visos de una resolución cercana.
La situación generada en las oficinas es insostenible tanto desde aspectos básicos como la salud laboral de todos los trabajadores y trabajadoras como del perjuicio que ha causado en nuestra imagen corporativa. Ahora mismo tenemos una clientela desconcertada, una clientela que se siente engañada y a la que tampoco puede darse una respuesta satisfactoria. Los problemas operativos se han solapado y confundido en el peor momento posible, con las dudas del sector. El negocio se está viendo seriamente resentido y no vemos capacidad de respuesta por parte de la Dirección para frenar esta situación.
Con nuestras palabras exigimos una explicación de lo ocurrido desde el inicio del proceso de integración y por qué se han obtenido resultados contrarios a los esperados. Igualmente exigimos que CajaGRANADA, a través de sus miembros en el Consejo de Administración, informe a BMN las terribles consecuencias que está ocasionando la decisión adoptada, así como que se depuren las responsabilidades que correspondan.
Exigimos también desde esta “tribuna” el máximo respeto hacia la plantilla. Una plantilla que lo está dando todo en la red de sucursales y en los SSCC, con horarios interminables y una clara falta de previsión y de apoyo institucional. Nuestro mayor reconocimiento para todos y todas ellas.
Por todo ello, Sr. Presidente, miembros de esta Asamblea, no daremos nuestro voto favorable a la gestión, por la responsabilidad directa que ambas instituciones, CajaGRANADA y BMN, con representantes en Órganos de Gobiernos y alta dirección, tienen en este momento.

martes, 5 de junio de 2012

INTEGRACION POR C...

Hace ya más de dos semanas que se inició la migración a los  sistemas tecnológicos de BMN.  Aunque en estos casos son lógicos los problemas  y las incidencias, lo que estamos viviendo ahora no tiene parangón con nada parecido que podamos recordar. Y la situación no está en absoluto estabilizada a pesar del tiempo transcurrido.

Valorar y cuantificar las incidencias comparativamente con procesos similares anteriores es complicado y poco útil. No existen registros ni indicadores que permitan una comparación objetiva y habría que basarse sólo en la memoria de los más viejos (especie que estamos consiguiendo extinguir) Incidencias, fallos y problemas siempre los ha habido y los habrá, es algo con lo que hay que contar.

Pero lo cierto es que la situación actual en la Red es un caos. Basta con salir del despacho para comprobarlo. La tensión y crispación que clientes y trabajadores viven en las sucursales es enorme. A nuestro juicio las causas están en un proceso mal diseñado, organizado y liderado.

Se ha cambiado TODO y a la vez. Con sólo que cada área operativa aporte unas pocas incidencias, la suma de todas resulta brutal. Es como operarse en un mismo día y en una sola intervención de apendicitis, fimosis, cataratas, fístula, muela del juicio… Por bien que vaya cada una el resultado es poco menos que te mueres.  No sabemos que se haya dado razón alguna de porqué se ha hecho así  y por tanto, tenemos derecho a dar por buena la deducción popular: hacerlo así conviene a los intereses de quien manda porque está ansioso de exhibir “integraciones” en la pasarela de las fusiones.

Sobredosis de cambio, demasiada medicina en una sola toma pero además sea por las prisas o por la falta de planificación, las cosas parecen poco pensadas y poco cuidadas ¿Era complicado sustituir en Caja Electrónica las referencias a Caja Murcia por referencias a Caja Granada?. Poco cuido y poco detalle parece que ha habido. Hay cientos de ejemplos y todos los conocemos.

Pero lo peor es que se ha dejado solas a las sucursales. Después del día D el silencio es total. No hay comunicaciones de las incidencias detectadas y de la solución que se le va a dar, no hay aclaraciones a las dudas más comunes (siempre suelen ser las mismas). A la vez, las unidades de SS.CC. del Cubo se han desmantelado y no se ha dado una alternativa de servicio clara, los pocos teléfonos disponibles comunican incansablemente. Algunos mandos les han sugerido a las oficinas desesperadas  que se busquen algún contacto en las sucursales de Caja Murcia y que les pregunten a ellos….

Las sucursales se bloquean, los compañeros/as no tienen respuestas a los clientes que reclaman soluciones a las  incidencias  y nadie da instrucciones de cómo resolverlas.  Se dieron cursos y se emitieron circulares (algunas atropelladamente a última hora). Se podría decir que los problemas han surgido porque la gente no las ha leído… Pero cualquiera con un poco de conocimiento y experiencia en estos cambios se avergonzaría por decir semejante cosa.

Porque la enorme acumulación de cambios y de nuevos conceptos y formas de hacer, la previsible acumulación de problemas en todas las áreas hubieran merecido una pensada para habilitar sistemas de información y comunicación entre la “dirección” (¿?) del proyecto y las sucursales. Un canal para aclarar dudas (el 80% siempre son las mismas) transmitir instrucciones, resolver incidencias, etc. Si se hubiera hecho, las sucursales no se hubieran sentido solas y abandonadas a su propia suerte. En estos tiempos existen medios técnicos más que suficientes para hacerlo. Si no se ha hecho es porque no se ha sabido o querido.

El resultado final es el que todos sabemos. Cualquiera que salga del despacho y oiga no ya a los compañeros/as sino a los clientes, lo que se dice en la calle, en las redes sociales, puede hacerse una idea del caos que vivimos. Y en el peor momento posible en todos los sentidos. El tiempo todo lo cura. Con el esfuerzo y la dedicación de la plantilla las cosas volverán a una cierta normalidad pero inevitablemente dejarán cicatrices, especialmente en la clientela y en el negocio. Da mucha rabia que las cosas se hagan así.

Da mucha rabia que los compañeros/as estén amargados/as y abandonados/as a su suerte. Que nuestra imagen y buena fama, un prestigio de más de 120 años se tire por los suelos y vaya de boca en boca.  Que los clientes de toda la vida salgan malhumorados buscando en otros sitios las respuestas y soluciones que nosotros no les damos. Hoy echamos a los clientes, mañana sobraremos muchos de nosotros/as y en los dos casos ellos estarán dirigiendo. O no.

N.B. En esta comunicación o en cualquier otra posterior no se hará relación escrita de los errores, incidencias, comunicaciones chuscas a clientes, alteración de condiciones comerciales y de servicio, etc. No la escribiremos por responsabilidad (no porque no la tengamos) porque todavía nos preocupa el buen nombre de la marca.