SUFRIMIENTO Y DERROCHE

De sobra sabemos que el proceso técnico de integración de cuatro cajas es difícil y complicado. Sabemos también que no están los tiempos para tirar el dinero. Todo eso lo sabemos de manera que no sirve como argumento: no estamos hablando de problemas ni de incidencias en el gasto, estamos hablando de derroche y de extravagancias organizativas.

Numerosos compañeros y compañeras  están actualmente desplazados en comisión de servicio dentro de los distintos territorios de BMN. Esta situación origina gastos importantes en desplazamientos, dietas, hoteles, etc. Además o por encima de estos gastos, se originan gravísimos problemas de conciliación de vida laboral y familiar.  No estamos hablando de uno ni de dos días de viaje, estamos hablando de meses fuera de sus casas, separados de hijos, de familiares dependientes, etc. Es un sacrificio tan importante que sólo una razón muy importante puede justificarlo.

Pero además la tensión, la preocupación y el miedo se agravan porque no conocen cuanto tiempo estarán en esa situación, si serán semanas o meses o que… Nadie les dice nada ni explica nada. Tampoco nadie les ha aclarado cual será su situación cuando termine la comisión de servicio y vuelvan a su origen ¿quedará algún sitio disponible? Nadie dice nada de nada.

Los compañeros/as desplazados a otros territorios no están ni transmitiendo ni recibiendo información o nuevos conocimientos. No están familiarizándose con  nuevos aplicativos o sistemas, están haciendo allí lo mismo que hacían aquí, manejando las mismas aplicaciones, los mismos papeles, los mismos procedimientos pero haciéndolo con menos medios y con las dificultades inherentes a la distancia.

¿Cuál es entonces la razón para tanto sacrificio personal? Sólo se nos ocurre que están intentando simular ante el Banco de España y el Ministerio de Economía que se están cumpliendo los tiempos marcados para la integración aunque no sea cierto.

Sabemos  que el sufrimiento de las personas es algo en lo que no reparan pero en este caso se están originando gastos cuantiosos para mover y alojar a estos compañeros y compañeras. ¿Qué sentido tienen estos gastos para seguir haciendo las mismas cosas de la misma manera? ¿Por qué tiran sin aparente sentido el dinero que luego quieren ahorrar con despidos? ¿Alguien está controlando estos gastos? ¿Alguien justifica porqué es necesario hacer las cosas así, tirando dinero?

¿Sabe estas cosas quien debe saberlo y evitarlo o son cuatro mandos  de poco pelo los que actúan así por chulería, poderío o quizás por intereses personales?