MADRID
(Reuters). /Por Jesús Aguado/
Los representantes
de los trabajadores de Bankia y de Banco de Valencia desconvocaron el martes la huelga que
estaba prevista para el 6 de febrero ante los avances sobre las condiciones de
recorte de plantilla, dejando a NovaGalicia Banco como la única entidad
convocante del parón en España.
"En la reunión mantenida en la mañana de hoy se
han producido movimientos significativos que acercan las posiciones de la
empresa (Bankia) a las pretensiones de la representación sindical", dijo
el martes Comisiones Obreras en un comunicado.
Una fuente sindical explicó que aunque todavía no se
había cerrado el acuerdo, las negociaciones preliminares apuntaban a que en
torno a una tercera parte de los 5.000 trabajadores inicialmente afectados por
el expediente de regulación de empleo (ERE) en Bankia podría acogerse a un plan
de prejubilaciones.
El resto se acogería a un plan de bajas incentivadas,
según la fuente.
"Todo parece apuntar a que puedan darse los
elementos necesarios para alcanzar un acuerdo", que podría producirse en
otra reunión que mantendrán la dirección y los sindicatos esta misma tarde, explicó CCOO en
la nota. El sindicato añadió que el plazo para cerrar el acuerdo definitivo se
extiende hasta el 9 de febrero.
El sector
financiero español, castigado por el estallido de la crisis inmobiliaria hace
cinco años- tuvo que ser rescatado en junio del año pasado con un crédito de
sus socios de la eurozona por hasta 100.000 millones de euros.
En diciembre, las
autoridades españolas recibieron en torno a 40.000 millones de euros para
sanear los balances de las principales entidades afectadas por los dañados
activos inmobiliarios en el balance a cambio de reducciones de hasta un 60 por
ciento en su negocio y fuertes recortes de plantilla.
Bankia fue el
principal receptor de la ayuda europea, unos 18.000 millones en total, y quiere
ajustar su plantilla compuesta por 19.000 trabajadores en un total de 6.000
personas mediante despidos y externalizaciones.
Los sindicatos
tienen como objetivo rebajar el número total de personas afectadas por el ERE
en Bankia más allá de los 4.900 personas en que había ya se había reducido el
expediente tras un acuerdo de externalización de servicios tecnológicos
alcanzados por Bankia con IBM. Este acuerdo redujo en cien el número de
personas afectadas por los recortes
Los sindicatos
siguen en negociaciones para que Bankia acceda a ofrecer unas indemnizaciones
en las salidas voluntarias de 30 días por anualidad con un tope de 24
mensualidades tras partir de una oferta inicial de 22 días por año trabajado
con un tope de 14 meses, dijo el martes una fuente sindical.
En protesta contra
los despidos, la mayoría de los sindicatos del sector bancario habían acordado
celebrar manifestaciones y paros parciales, que culminaban en una huelga que
ahora sólo afecta a NovaGalicia Banco.
La huelga
convocada para este miércoles es la primera desde los años 90 convocada en un
sector en el que son muy infrecuentes este tipo de protestas, aunque han ido en
aumento en un momento de fuerte caída de la actividad bancaria y de escándalos
en la comercialización de productos financieros.
Además, el
descontento social en España contra la banca también se ha incrementado por los
sobresueldos e indemnizaciones multimillonarias cobrados en algunos casos por
ejecutivos de una serie de cajas que ahora están sufriendo los recortes de Bruselas.
Un portavoz de la
entidad gallega, que cuenta con un plantilla de 5.000 trabajadores, confirmó
que la huelga seguía convocada para mañana, ya que esta entidad disponía de una
semana más de plazo en las negociaciones con sus trabajadores.
Banco de Valencia
había desconvocado esta mañana la huelga tras alcanzar un preacuerdo para
reducir el número de despidos finalmente a 795 frente los 890 inicialmente
planteados.
Desde el estallido
de la crisis financiera en 2007, el número de empleados en el sector financiero
español se ha reducido desde los 270.000 a los 238.500 empleados a finales de
2012. Según datos de CCOO, la plantilla en los bancos podría incluso reducirse
hasta 218.500 trabajadores si se sigue avanzando en el ritmo de despidos
planteados.
Esto
supondría volver a unas plantillas a niveles de 1975, según este sindicato.
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